×

Mesa redonda “El papel de la Educación Social en la Promoción del Envejecimiento Activo y la Acción Social Intergeneracional”

Autoría:

Redacción

VI CONGRESO ESTATAL DE EDUCACIÓN SOCIAL

“Nuevas Visiones para la Educación Social, experiencias y retos de futuro”

MESA REDONDA

El papel de la Educación Social en la Promoción del Envejecimiento Activo y la Acción Social Intergeneracional

Mesa redonda

Intervienen

D. Antonio Martínez Maroto – Jefe del Área de Envejecimiento Activo del IMSERSO.Políticas de Envejecimiento Activo en el Marco del Año Europeo.

D. Quico Mañós de Balanzó – Educador Social, Director de Consultoría Zotikos. CEESC.El reto del Envejecimiento Activo en la Discapacidad.

Dra. Dña. Sacramento Pinazo – Doctora en Psicología, Pedagoga y Profesora Titular de Psicología Social de la Universidad de Valencia. Políticas y Beneficios de la Intergeneracionalidad.

Dña. Marichu Calvo de Mora González – Educadora Social, Coordinadora Comisión No Permanente Año Europeo del CGCEES. Educación Social: Presente y Futuro del Envejecimiento Activo y la Participación Comunitaria.

Modera: Mª Teresa Volpe Venturi – Miembro del Consejo General de Colegios Profesionales de Educadores Sociales CGEESS y CPEESM

Uno de los temas centrales que nos planteamos para el Congreso era destacar el fundamental  papel de la EDUCACIÓN  en la promoción de la Autonomía y la Independencia de las personas mayores para vivir un Envejecimiento Activo, prevenir  la Dependencia y activar la Participación de los/as ciudadanos/as mayores,  la cohesión  y la acción social intergeneracional en el marco de este año 2012, Año Europeo del Envejecimiento Activo y la Solidaridad Intergeneracional.

“Según datos del Libro Blanco sobre el Envejecimiento elaborado por el IMSERSO (2011), la población española mayor de 65 años, en Enero de 2010 era de 7,9 millones de personas, lo que representa un 16,9% del total de la población. En los últimos 45 años, el porcentaje de personas mayores en nuestro país se ha duplicado, pasando del 7% al 14%,  una tasa que,  Francia tardó 115 años en alcanzar y Suecia 85 años.

Se estima, dada la ausencia de investigaciones oficiales, que “entre el 60% y el 70% de las personas mayores de 65 años y sus cónyuges, se encuentran inscritas en Centros Socioculturales de Mayores, de titularidad pública o privada, antes denominados Hogares de pensionistas o Clubes de jubilados, y/o asociadas a organizaciones de mayores, por lo que aproximadamente 5,6 millones de personas mayores estarían vinculadas a estos equipamientos, en mayor o menor medida, en los que además de ser receptores de la amplia y diversa oferta de actividades, cuya máxima es el desarrollo personal y social para la prevención del envejecimiento dependiente; aprenden, participan y promueven iniciativas sociales solidarias para contribuir con su conocimiento y experiencia de vida a la sociedad. Al igual que desde los Programas Universitarios de Mayores que cuentan con más de 40.000 alumnos mayores de 50 años (en 2007 solo eran 23.000)”.

“En tiempos de crisis y ante el avance demográfico, además de que cuiden a los nietos y sus pensiones sean hoy el único ingreso de muchas familias, cabría preguntarse sobre el futuro de la ciudadanía europea sin la contribución de sus ciudadanos/as mayores; cuya experiencia de vida a lo largo del siglo XX, nos aportaría valores y valiosos conocimientos para superar tiempos difíciles”

Sobre estos argumentos y sobre la necesaria colaboración Institucional se planteó la mesa redonda, en la que las Conclusiones básicamente las resumimos:

1. La progresión demográfica del envejecimiento y sus consecuencias, a la vista de los datos presentados por el IMSERSO, plantea nuevos retos de sostenibilidad y paz social que pasan por la contribución efectiva de las personas mayores a la sociedad y que la sociedad reconozca, reclame y otorgue el valor que le corresponde a la ciudadanía mayor.

2. Es necesario garantizar el equilibrio entre  ejercicio de derechos y deberes de las Personas Mayores, asegurándose la protección de la dependencia y la promoción de su autonomía e independencia para vivir el mayor tiempo posible libres de dependencia y en plenas condiciones para continuar aportando a la sociedad su conocimiento, experiencia y solidaridad.

3. La Educación Social y la Animación Sociocultural desarrollan Programas Socioeducativos y de Participación Ciudadana e intergeneracional desde hace más de dos décadas, desde las Administraciones Públicas, fundamentalmente las Autonómicas y Locales desde los equipamientos municipales de proximidad al ciudadano, generalmente dependientes de la Red Pública de Servicios Sociales y de otras Instituciones y de entidades privadas como las Universidades, las Fundaciones, las Obras Sociales de las Cajas de Ahorros, y otras entidades no gubernamentales.

Una larga trayectoria de trabajo desde finales de los años ochenta, que no podemos obviar, porque ha permitido, por ejemplo; trasformar los estereotipados Hogares de Pensionistas y Jubilados en auténticos Centros Socioeducativos de Personas Mayores y/o intergeneracionales abiertos a la comunidad, o implementar Programas Formativos en TICs, Redes Sociales on line, Programas de entrenamiento  cognitivo y adaptación a los cambios vitales, Alfabetización, Hábitos de vida saludable, Actividad física, Habilidades Sociales, o el acceso a las Universidades, programas de acción Local intergeneracional, participación y Voluntariado, etc…

4. Sin embargo, estos Programas Educativos cuyo objetivo es de una parte, el desarrollo integral de la persona a partir de su experiencia de vida, capacidades, necesidades e intereses personales y de otra favorecer las relaciones sociales, la participación ciudadana y su aportación a la sociedad, carecen del reconocimiento que merecen como medio para mejorar tanto el bienestar se la persona como el de su entorno comunitario al recibir su aportaciones.

5. Es necesario valorar estos programas educativos, así como innovar los modelos de gestión, los equipamientos y Programas y Servicios que se ofrecen desde ellos, adecuando y rentabilizando todos los recursos disponibles (Centros de Mayores, Residencias, Centros de Día, Universidades de Mayores, Escuelas de Personas Adultas, Centros Culturales, Polideportivos, Espacios públicos, Centros Educativos de Primaria y Secundaria, etc….) en cada territorio a través del trabajo en red.

6. Los Programas de Promoción del Envejecimiento Activo además de contenidos y metodologías específicas para atender a la diversidad de las generaciones de personas mayores; deben incorporar transversalmente la intergeneracionalidad.

Es decir, las relaciones entre distintas generaciones deben ser una constante, y educar a todas ellas en la perspectiva del envejecimiento como proceso del ciclo de la vida en el que se rompan estereotipos de etapa de declive y déficit, para que sean sustituidos por la oportunidad de desarrollo personal, comunitario y de aportación social de experiencia de vida, conocimiento y solidaridad. Estos programas deben orientarse a propiciar la sensibilización social para este necesario cambio cultural a partir de la participación libre y responsable de toda la ciudadanía.

La coordinación de la Mesa Redonda trabajó antes del evento para dar forma y contenido a la misma. Se realizaron múltiples tareas de coordinación, gestión de contactos y difusión del evento.

En  esa jornada la coordinación se realizó desde la acogida de los ponentes a su llegada al recinto, la bienvenida de las autoridades del Consejo y la  entrega de materiales del Congreso.

Luego se realizó una reunión en una sala,  para consensuar y establecer el orden y los tiempos, para  el conocimiento previo entre  los ponentes y para la revisión técnica de los materiales audiovisuales a presentar. 

Participantes

Todo funcionó perfectamente, tanto en el aspecto técnico como en las exposiciones.

La  mesa redonda se desarrollo según lo previsto y hubo bastante participación. Aunque el auditorio principal, al ser tan grande, dispersaba las personas y daba un aspecto de poca audiencia.  Se contabilizaron unas 30 personas asistentes.

Se dio al final un turno para preguntas en las que se realizaron varias intervenciones de profesionales de diferentes orígenes y ámbitos.

Se explicó y difundió la tarea de la Comisión No Permanente de Envejecimiento Activo del Consejo General y se facilitó mail de contacto para los asistentes interesados en esta temática.

Una vez finalizada la mesa redonda se acercaron personas interesadas, intercambiamos información  para continuar en contacto.

La coordinación corrió a cargo de Marichu Calvo de Mora (CPEESM), Quico Maños (CEESC) y Maria Teresa Volpe (CPEESM).

Una vez finalizada la mesa redonda se acompañó en todo momento a los ponentes. Además compartimos una cena  de convivencia agradeciendo su participación y emplazándonos para nuevos encuentros y seguir manteniendo la colaboración.